Este libro es, sobre todo, un viaje. Un viaje físico pero también un viaje espiritual. Moussa Ag Assarid nos invita a hacer ese recorrido con él.
Se trata de un nómada, un tuareg nacido en Mali que, llegado un momento de su vida, decide cambiar las arenas del desierto por una Francia demasiado diferente a ellas, con todo lo que eso va a suponer. A través de estas páginas uno descubre un mundo nuevo, un mundo alejado de lo que algunos estamos acostumbrados a vivir. Pero, al mismo tiempo, el autor crea un puente entre dos culturas. Sus palabras nos ayudan a entender el mundo en el que se crió y a descubrir una forma de enfrentarnos al nuestro. Ag Assarid nos narra con una voz que suena tierna e inocente una serie de experiencias a través de las cuales podemos sentir lo que un chico joven como él, que hasta ese momento había vivido totalmente desprendido en mitad del desierto, siente al encontrarse, de repente, con Europa. Es una radiografía de su mundo y su mentalidad pero es también un espejo en el que mirarnos a nosotros mismos, quienes vivimos inmersos en nuestra cultura occidental sin volver demasiado la vista a la riqueza que se esconde más allá de nuestras fronteras. Su voz nos hará plantearnos, entre otras cosas, algunas tan importantes como qué es el tiempo, cómo lo aprovechamos, en qué ponemos nuestra vida o a qué le damos valor...
En el desierto no hay atascos es un libro que se lee con mucha facilidad. Está compuesto por pequeños capítulos con los que reflexionar sobre distintos aspectos de lo cotidiano y lo que nos pasa por la cabeza. Con el autor podemos conocer algunas pinceladas de la historia más reciente de Mali pero, sobre todo, podemos adentrarnos en la vida de un pueblo milenario a veces ignorado o acallado. Es un acercamiento al mundo del desierto, un lugar de encuentro y descubrimiento para dejarnos empapar por su filosofía y su modo de entender la existencia.
Para invitarte a que te adentres en esta obra tomo prestadas las palabras de su autor: "Si tuviera que daros un consejo os diría: Abrid vuestro corazón".